En la vida nadie te regala nada, hay que luchar por conseguir los sueños y aunque muchas veces algo se vea inalcanzable, la perseverancia, el esfuerzo y talento siempre estarán de tu lado si entregas toda tu calidad humana. La entrevistada de la semblanza de esta ocasión es el fiel reflejo de eso. Catalina Rivera, es la actual gerente de personas de Clínica Dávila, psicóloga de profesión, tiene un magíster en RH y se encuentra realizando un programa ejecutivo en la Universidad de Columbia (EE.UU).
Es la primera profesional de una familia de escasos recursos, estudiante de colegio y universidad pública. Mujer, madre, inmigrante en múltiples ocasiones, sin duda que haber llegado hasta donde está le parece un milagro. Haber sido parte de proyectos con alto impacto, desarrollar una carrera internacional siendo muchas veces la única mujer y la persona más joven de la mesa es algo que la llena de orgullo.
Se lo ha estudiado todo y sigue, felizmente como la única latina en el programa de la escuela de negocios de la universidad de Columbia en New York, que no tiene que ver con recursos humanos sino con general management y cómo liderar hacia el futuro en todos los ámbitos. Desde las personas, nuevas tecnologías, medio ambiente y gobierno.
Pero sin duda que su mayor regalo es que sus hijas la apoyen en cada locura, que le den ánimo todos los días para seguir creciendo.
El inicio del viaje
Su carrera laboral partió en una consultora que ya no existe (Hewitt) como practicante, gracias a su jefa, Pilar Álvarez, quien la recomendó para tomar un puesto de analista en Masisa. Ahí la recibió Ana María Rabagliati, quien le enseñó todo lo que sabe y delineó lo que es hoy como profesional. Estuvo muchos años trabajando en un proyecto de productividad que fue bastante exitoso, por lo que emigró a México a los 27, para desempeñarse como gerente de RH y DO en la Ciudad de México. Luego de unos años, SMU estaba formándose y la trajeron de vuelta a Chile para tomar la gerencia de cultura y talento.
Pero al andar, Groupon, especialmente Juan Pablo Cuevas -fundador de dicha empresa y también Cornershop. la invitó a ser parte del desafío de formar la empresa para Latam, como gerente de RH. Desde 2015, se radicó en Estados Unidos, en donde luego de un año tocando puertas y convencida de que tenía que existir una oportunidad, consiguió el puesto de directora de talento para Latam, Europa y África en American Tower. Luego de 5 años exitosos, United Health Group – Empresas Banmédica – la trajo de regreso al país y desde entonces está en el grupo, como directora de talento.
RH, constantes desafíos
Cuenta que su principal reto ha sido acompañar a la estrategia y ser parte de su elaboración en múltiples ocasiones. Cómo transformar un negocio y movilizar a la organización a través de cada uno de sus integrantes es la tarea del área de personas. Dibujar a la fuerza laboral, como colaborar con los actores clave del mundo público y privado para sobrellevar los desafíos que trae el futuro del trabajo, es lo que tiene su agenda 100% ocupada.
“Trabajar en el área de personas es un privilegio, que permite impactar el éxito del negocio, pero sobre todo, la vida de las personas que forman parte de la organización y que nos prefieren como clientes. Al final, todo se resume en entender a las personas y fortalecer sus relaciones y colaboración. Tenemos que despertar y trabajar siendo ágiles, flexibles y resilientes a través de cada actividad, proceso y proyecto del área de RH”, piensa.
Proyecciones, metas y seguir en el camino hacia el éxito personal y profesional
Tiene la convicción de trabajar en colaboración estrecha entre el mundo privado y el sector público. Son necesarias políticas que impulsen la flexibilidad laboral y que permita a las empresas y a sus trabajadores los mayores retornos. “Estoy segura de que el camino está en la sinergia que podamos generar para responder con la mayor agilidad posible los retos que traiga el futuro”, afirma categóricamente.
Participar activamente en mesas de trabajo -Amcham es una de sus favoritas-, mantener estrecha comunicación con los sindicatos, entender a los clientes y comunidades es el foco que tiene en estos años venideros. De ahí su agradecimiento por la beca en Columbia y todo lo que se puede aportar desde ahí para este desafío.
Respecto del éxito alcanzado, la clave es ¡Nunca rendirse! “Sin duda que me han cerrado la puerta el 99% de las veces. Pero solo es necesario una oportunidad y aprovecharla con todo. Y si no funciona, volver a intentarlo”, expresa de forma muy entusiasta.
Mensaje para todas las mujeres: ¡perseverancia y lucha por la igualdad!
Como mujer y mamá, espera que quienes tienen roles de liderazgo sigan visibilizando la importancia de la crianza compartida. Es ahí en donde está el equilibrio que les permita desarrollarse en cada ámbito. Igualdad de beneficios y oportunidades entre hombres y mujeres debe ser prioritario en la agenda y podemos hacerlo realidad.
“Para aquellas mujeres que empiezan, trabajen en su marca personal. Sean fieles a su estilo, sean valientes y no se rindan ante un no, ni ante miles de no. Como la analogía del costo de una botella de agua en el kiosko de la esquina o el aeropuerto, no se cansen de buscar el lugar en donde sus capacidades y estilo personal sea valorado”, concluye.