Un reciente artículo publicado en Time por el periodista Jaime Ducharme revela que una semana laboral de cuatro días puede tener beneficios significativos para la salud de los empleados. El estudio, basado en investigaciones previas sobre el bienestar psicológico y el estilo de vida, ha demostrado que esta reducción en la jornada laboral conlleva una disminución en la ansiedad y el estrés, además de permitir un mejor sueño y más tiempo para realizar ejercicio.
El coautor del informe, Brendan Burchell, profesor de ciencias sociales en la Universidad de Cambridge en el Reino Unido, quien ha dedicado su investigación al estudio de los efectos del trabajo en el bienestar psicológico, se mostró optimista ante los resultados obtenidos. “Incluso con nuestro escepticismo académico, ha sido un resultado realmente positivo”, afirmó Burchell.
El informe se basó en la experiencia de 61 empresas y alrededor de 2,900 empleados que probaron semanas laborales más cortas durante un período de seis meses, comprendido entre junio y diciembre de 2022. Estas empresas fueron reclutadas por grupos defensores como 4 Day Week Global y 4 Day Week Campaign, así como por el grupo de investigación laboral Autonomy, y contaron con la supervisión de investigadores de Boston College y la Universidad de Cambridge, incluido el profesor Burchell. Durante el estudio, las empresas tuvieron la libertad de establecer sus horarios como desearan, siempre y cuando redujeran “significativamente” las horas de trabajo sin disminuir el salario.
Durante el período de prueba, las horas de trabajo semanales promedio de los empleados se redujeron de 38 a 34, aproximándose al objetivo de 32 horas. Alrededor del 71% de los encuestados afirmaron que trabajaban menos después del período de prueba en comparación con antes. Las soluciones implementadas por las empresas variaron, con más de la mitad de ellas otorgando a todos los empleados un día libre los lunes o viernes, mientras que otras optaron por horarios escalonados o días de trabajo más cortos a lo largo de la semana.
Los resultados obtenidos fueron prometedores. Alrededor del 40% de los encuestados informaron una disminución en el estrés relacionado con el trabajo, mientras que el 71% reportó niveles más bajos de agotamiento. Además, más del 40% de los empleados indicaron una mejora en su salud mental, y una parte significativa del grupo experimentó una reducción en la ansiedad y las emociones negativas.
Si bien el estudio se centró principalmente en empresas del Reino Unido, sus hallazgos ofrecen una visión esperanzadora sobre cómo una semana laboral de cuatro días puede impactar positivamente en la salud y el bienestar de los trabajadores. Los resultados pueden servir de base para futuras políticas laborales que busquen mejorar la calidad de vida de los empleados y reducir los niveles de estrés en el entorno laboral.
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