Alejandra Piña, gerente RH de Beiersdorf, tenía muchos prejuicios frente a la generación Y, esos jóvenes nacidos después de 1985 a quienes también llamamos millennials: “Antes pensaba que era un problema pero cuando uno se decide a quebrar paradigmas y a trabajar con ellos y para ellos, cambia harto la mirada”, confesó la ejecutiva en su exposición durante encuentro organizado pro RH Management y Mutual sobre las oportunidades de la generación Millennial.
La ejecutiva agregó que “uno empieza a darse cuenta de que esto es un trabajo colaborativo que es lo que ellos tanto verbalizan, que les gusta estar en un lugar donde puedan ser ellos, aportar, sentirse libres”, aseguró, agregando que en Beiersdorf “trabajamos en ir seduciéndolos día a día en un trabajo que en lo personal creo que alguien dejó de hacer, porque estos cabros necesitan alguien que los guíe, que los ayude, que tengan conversaciones interesantes”, expresó.
Dinero como accesorio
Alejandra Piña enumeró algunas diferencias entre la generación X, a la que ella pertenece, y los millennials: “Muchos de ellos manifiestan que la plata es un accesorio. Sin embargo, cuando uno piensa en alguien de la Generación X la plata no es un accesorio, es tu mira, dicen ‘voy a ir subiendo porque eso implica mejores expectativas económicas’. Los millennials nos desafían todos los días a hacer proyectos atractivos para ellos, actividades donde puedan aportar, sumar valor, y ese ha sido el gran desafío como área, generar espacios más transversales”, aseguró.
La ejecutiva contó que en su compañía han ido pasando de una estructura bien jerárquica a otra más plana y que a nivel global, Beiersdorf ha tenido “una mirada bastante visionaria”: “Estamos trabajando en un proyecto que la compañía partió hace dos años buscando 150 cupos para jóvenes profesionales que sean los sucesores nuestros el día de mañana. A mí me tocó ser parte de este proyecto en términos de definir las competencias que íbamos a buscar a nivel global, y ya me parece que desde ahí es abrirse a un cambio”.
A ella, trabajar con las nuevas generaciones le ha servido para quebrar paradigmas y estar constantemente aprendiendo. La ejecutiva contó que el gran cambio cultural que han realizado lo hicieron tomando lo que dice la literatura sobre los millennial: “Que es gente que quiere emprender, entonces generemos los espacios, es gente que quiere autonomía, seamos consecuentes con el lenguaje, generemos un lenguaje común”.
Se vienen los Z
El principal desafío que han encontrado para esta transformación al interior de la empresa es que hay líderes que rechazan el cambio: “ Pero la compañía determinó que el líder que no esté en esta línea tiene que salir de la organización y en la última reunión global de RH el CEO fue muy claro en declarar que el que quiere quedar obsoleto es el que no se adapta a lo que viene, ellos ya están mirando los Z y todo lo que se viene. Los que quieran estar tienen que adaptarse a eso.sobre todo pensando que estos chicos mañana van a dirigir las organizaciones”.
Reflejo de lo que pasa en Chile
El otro expositor del encuentro fue Cristian Valdivieso, socio director de Criteria Research, quien tomó algunas tendencias que ha estado observando que tienen que ver con el páís en general. “Porque lo que estamos discutiendo sobre las generaciones también es reflejo de lo que está pasando en Chile; lo que sucede en el mundo laboral es un microclima de lo que está pasando a nivel del páis, entonces evidentemente hoy día en las organizaciones hay un cambio de paradigma”.
Para el profesional, decirlo es lógico y hasta cliché, pero vivirlo no es así: “Hoy las empresas tienen que ser una oferta de valor para los empleados y el paradigma antiguo de los baby boomers y los X era al revés, con una empresa con un valor percibido en sí misma. Las nuevas generaciones Chile son más sinérgicas, más igualitarias en cuanto a las expectativas de cómo me desarrollo con los otros, por lo tanto una gran empresa no es por defecto alguien admirable y eso a nivel de las masas también se experimenta mucho. Tenemos que ser oferta para las nuevas generaciones, oferta para el Chile de hoy”, sentencia.
Vergüenza y Stress
De acuerdo a Valdivieso, cuando le preguntamos a jóvenes que estudian ingeniería comercial y civil a punto de egresar qué es lo que piensan hacer una vez que egresen, sólo el 54 % va a buscar trabajo inmediatamente, el 27% se va a tomar un tiempo para hacer otras cosas. “No tienen ningún apremio, lo que nos habla también de que tampoco tienen susto de quedar obsoletos”, agregó el profesional. En el estudio, el 15% manifiesta que quiere seguir formándose.
Valdivieso mostró más cifras sobre qué emociones le generan ciertas industrias a los Y. “Vemos que lo que pasa en el país también se refleja en estas personas y en la disposición a trabajar, pues el 51% de estos jóvenes, respecto a las Isapres, tiene sólo emociones negativas, lo mismo con las AFP. Que son aburridos, que me da vergüenza y que es estresante, dicen. La banca también tiene un 39 por ciento de emociones negativas, relacionadas con stress y aburrimiento, a diferencia de las AFP y las Isapre tiene que ver con vergüenza.