Gerentes de gestión de personas de Agrosuper, Grupo Security, Banco Estado, Workmed, Saam, Metro, Anglo American, Indra, junto a académicos de la Universidad Diego Portales y docentes europeos de clase mundial, como Ståle Einarsen y Karina Nielsen, se dieron cita en el restaurant La Mar, donde hubo una conversación sobre violencia en el trabajo salud mental y salud mental.
Hubo cebiche, tiradito laqueado (salmón con salsa pasionaria de maracuyá), entre lo más destacado para comenzar. Luego vino el fondo con chaufa La Mar (chifa peruano con mariscos), ají de mariscos en crema de almendras parmesano, pasta a la mar y saltado clásico (“tradicional lomo saltado limeño de toda la vida”).
El postre había para elegir entre suspiro limeño, tres leches y sorbetes. Para beber, es indispensable el pisco sour peruano, además de jugos y limonadas.
Isabel Alliende (Grupo Security), junto con agradecer la instancia de conversación, “La Mar es exquisita, me fascina la comida del mar, los tiraditos, las cosas crudas con limón. Es una suerte poder venir a lugares de este estándar en Santiago”.
En tanto, Fernando Morelli, de Agrosuper, “me encanta que RH Management nos invite a estos espacios íntimos de conversación, interesante, con una comida rica. Nos pasaron una lista de platos que era solo para marearse, porque cualquiera hubiera sido una delicia”. Agregó que los encuentros presenciales sirven “para compartir el camino en que estamos, en la ruta de mejorar las empresas en Chile”.
No solo hubo empresas privadas, sino también públicas como Metro. Patricio Baronti, gerente corporativo de personas, destacó el lugar del almuerzo, “que es muy bueno para conversar, se da un espacio para que agarre confianza y lo otro rico de la mesa, es que teníamos a personas que trabajamos en distintos mundos”.
También fue el caso de Banco Estado, con la gerente de personas Liliana Vildósola: “La presentación de los dos expositores, muy buena, muy amena”.
Gabriela Torres, de Anglo American, sostuvo que estos espacios permiten la reflexión, ya que los ejecutivos de recursos humanos están inmersos en el día a día. “El mostrar prácticas que pueden ayudarnos, pero que no representan una receta única, por ejemplo el entender y escuchar lo que los trabajadores necesitan desde una perspectiva de flexibilidad. No hay una receta única”.