Berto Pena, un destacado experto en productividad y gestión del tiempo nos ofrece en su libro “Superhábitos” una perspectiva pragmática para construir hábitos sólidos y duraderos en pro de alcanzar el éxito en todas las áreas de la vida.
La búsqueda constante de formas eficaces para aprovechar el tiempo y lograr más en la vida se ha convertido en un desafío común, y la premisa de este libro es que los hábitos desempeñan un papel fundamental en todo este proceso.
El autor señala que los hábitos son comportamientos repetitivos arraigados en nuestro subconsciente y cambiarlos puede ser la clave para una vida más productiva y satisfactoria.
¿Por qué el autor prefiere hablar de Súperhabitos? Porque las rutinas que propone son transformadoras y pueden impactar profundamente en nuestra vida, logrando un cambio significativo.
En su libro, Pena presenta un enfoque práctico en cinco pasos para construir hábitos sólidos:
- Definición del hábito: El primer paso es definir claramente el hábito que deseamos desarrollar. Esto implica comprender por qué queremos establecer ese hábito y qué beneficios nos aportará.
- Mini acciones y repetición: Pena destaca que la fuerza de voluntad por sí sola no es suficiente. En su lugar, aboga por dividir los hábitos en mini acciones concretas y repetirlas gradualmente hasta que se conviertan en una parte natural de nuestra rutina.
- Momento y frecuencia: Establecer un momento específico y una frecuencia para realizar el hábito es esencial para incorporarlo con éxito en nuestras vidas.
- Activador: Es un recordatorio o señal que nos ayuda a recordar en qué momentos realizar el hábito. Esto puede ser una alarma en el teléfono, una nota adhesiva o cualquier otra cosa que funcione para nosotros.
- Eliminación de resistencias: Antes de comenzar un nuevo hábito, es vital identificar y eliminar las resistencias que podrían obstaculizar nuestro progreso. Estas resistencias pueden ser distracciones, malos hábitos existentes o cualquier otro obstáculo.
El autor invita a adoptar estos pasos, evitando perderse en “micro circunstancias” y centrarnos en nuestras acciones diarias para alcanzar nuestros objetivos.