No es una película de ciencia ficción ni de terror. Es la cruda realidad. Ayer ONU Mujeres emitió el documento “El progreso en el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS): Panorama de género 2022”, donde advierte que tomará cerca de tres siglos alcanzar la igualdad de género a nivel mundial. Carla Rojas, Carolina Martinez y Alejandra Sepúlveda nos dicen qué caminos debemos tomar para cambiar el guión e interpelan a los principales guionistas, el actual mundo político.
En el informe la entidad se refiere a las causas de este largo proceso de cambio. Por un lado están múltiples crisis mundiales, como la pandemia del Covid-19, el cambio climático y los conflictos bélicos. Mientras que, por el otro lado, se encuentran los retrocesos en los derechos en cuanto a salud sexual y reproductiva de las mujeres. Ambos factores son los que están agravando la disparidad de género en el mundo.
“Este es un punto de inflexión para los derechos de las mujeres y la igualdad de género a medida que nos acercamos a la mitad del camino hacia el 2030. Es crucial que nos movilicemos ahora para invertir en las mujeres y niñas, y recuperar y acelerar el progreso. Los datos muestran regresiones indiscutibles en sus vidas, en cuanto a ingresos, seguridad, educación y salud, que han empeorado por las crisis mundiales. Cuanto más tardemos en revertir esta tendencia, más nos costará a todas y todos”, declaró Sima Bahous, directora ejecutiva de ONU Mujeres.
Para analizar esa situación en el panorama nacional contactamos a tres expertas en la temática: Carla Rojas, coordinadora de inclusión y género en la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Chile; Carolina Martínez, presidenta de RedMad; y Alejandra Sepúlveda, presidenta ejecutiva de ComunidadMujer, quienes nos entregaron su visión respecto al “catastrófico” tiempo que implicaría lograr la igualdad de género.
Carla Rojas comenta que si bien las cifras son desalentadoras en materia de igualdad, es la realidad de las mujeres en el mundo. “Específicamente, pensando en Chile, tenemos las peores cifras de los últimos años en violencia sexual, en participación laboral femenina, y también la Dirección del Trabajo ha señalado que hay un aumento del 350% en casos de acoso sexual en las organizaciones”, señala.
Afirma que la violencia de género no se detiene solamente por decreto, sino que “tiene que ir acompañado por legislación normativa, pero también por un fuerte cambio cultural con enfoque de género y erradicar la violencia a través de estos actos. Existe una cultura patriarcal que promueve la violencia hacia las mujeres y esto necesita de acciones sistemáticas desde los espacios para poder avanzar”. Además, añade que “ en Chile vemos un 30% de brecha salarial, la peor participación femenina laboral en la región con un 47% y también, a nivel de parlamento, tenemos las participaciones más bajas de mujeres”.
Por su parte, Carolina Martínez indica que la participación laboral de las mujeres es un factor clave para lograr el progreso en los países. “En el contexto actual es especialmente importante para la recuperación económica y para avanzar hacia una sociedad más justa y sostenible. Si bien, estamos avanzando en la dirección correcta, estas cifras nos demuestran que tenemos que acelerar el ritmo de manera urgente, trabajando de manera conjunta, las empresas, el Estado, la academia y las distintas organizaciones de la sociedad civil”, afirma.
Mientras que Alejandra Sepúlveda hace hincapié en el ritmo de transformaciones que nos llevaría a lograr eliminar las brechas de género dentro de los 286 años previstos por la ONU. “Estos plazos que nos plantea la ONU son catastróficos para las mujeres. La verdad es que no podemos esperar casi 300 años a que las condiciones mejoren, Y para eso es fundamental contar con un acuerdo transversal del mundo político para que se levanten políticas públicas que fomenten la acción laboral de las mujeres especialmente en este momento de recuperación post crisis sanitaria que ha sido de un elevado costo”, opina.
Además, manifiesta que para revertir este periodo de tiempo y conseguir eliminar la barreras de género debemos “asegurar una participación equilibrada en términos de género en los espacios de representación y promover políticas en pro de la igualdad salarial y protección ante la violencia de género. Son un conjunto de acciones que se deben empujar para mejorar índices e ir cerrando estas brechas de género, yo creo que en definitiva tenemos que avanzar a un nuevo pacto social que termine desmontando esta sociedad patriarcal que nos ha regido por tantos siglos para poder avanzar en oportunidades e igualdad de género”.